Curso
de Especialista en Educación para la Ciudadanía y Derechos Humanos |
Módulo 2. Importancia de la Educación en Derechos Humanos Tema 2.1. La Transmisión de los Valores |
El desarrollo de determinados acontecimiento en la sociedad actual, por ejemplo los casos de torturas y ejecuciones, la falta de acceso a recursos básico como el agua y la sanidad o el uso de menores como soldados, nos muestra un mundo y una ciudadanía que no respeta los derechos humanos.
La educación que hemos recibido no ha solucionado, en ocasiones incluso ha fomentado, la desigualdad y la discriminación entre hombres y mujeres. La violencia contra las mujeres es un hecho por desgracia cotidiano que sigue sin resolverse. En el ámbito laboral, existe una tasa de paro femenino cuatro veces más elevada que la tasa masculina. La diferencia de salarios entre hombres y mujeres puede llegar a ser del 20%, y se da la paradoja de que el aumento de la escolarización en muchos países ha implicado una alta cualificación de hombres y mujeres, pero no ha corregido la desigualdad en el ámbito laboral.
Se hace evidente que sólo con medidas represivas no pueden solucionarse estos conflictos, y que la educación es la única medida realmente eficaz, aunque sea a largo plazo.
Por otro lado, en las escuelas cada vez es mayor la proporción de alumnos y alumnas de otros países, de distintas etnias y religiones, lo que obliga a educar en la tolerancia y el respeto a la diferencia. Debemos usar la educación reglada para transmitir estos valores. Esta idea no es nueva, de hecho es tan antigua como el pensamiento filosófico.
Sócrates ya nos decía que la educación posee una connotación moral importante, ya que enseņando lo que es correcto, el individuo actuará de forma correcta: el mal es fruto de la ignorancia. Es lo que se ha llamado el Intelectualismo Moral. Quizás, esta idea, si la llevamos al extremo puede parecernos algo ingenua: Todos los que poseen una buena base cultural, actuarán siempre correctamente. Evidentemente esto es falso, pero si no totalizamos esta idea, sí es correcta.
Busto de Sócrates (Museo del Louvre)
Una sociedad más culta en educación en valores tendrá muchos menos problemas de intolerancia y discriminación.
La educación no erradicará por completo las conductas incívicas e insolidarias: siempre encontraremos ejemplos de personas con un nivel cultural envidiable y un comportamiento nada cívico, pero estos casos no deben limitar los esfuerzos de los educadores y las educadoras por universalizar la educación en valores en general y la educación en derechos humanos en particular.
La comunidad internacional ha expresado cada vez más el consenso de que la educación en derechos humanos contribuye decisivamente a la realización de los derechos humanos. La educación en derechos humanos tiene por objeto fomentar el entendimiento de que cada persona comparte la responsabilidad de lograr que los derechos humanos sean una realidad en cada comunidad y en la sociedad en su conjunto. En este sentido, contribuye a la prevención a largo plazo de los abusos de derechos humanos y a los conflictos violentos, a la promoción de la igualdad y el desarrollo sostenible. Asimismo hay que tener presente que los ciudadanos conocedores de sus derechos están en mejores condiciones de exigir a sus autoridades el cumplimiento de todos sus derechos.