Una joven de 17 años fue lapidada el pasado viernes en Tiartet, localidad argelina situada a 300 kilómetros al suroeste de Argel, por una "pandilla de muchachos instigados por adultos histéricos" por llevar una falda corta, según publicó ayer el periódico Alger-republicain.

Los muchachos golpearon con piedras y patearon a la joven, que también fue víctima de salivazos en el rostro, por el mero hecho de "llevar una falda demasiado corta a los ojos de sus masacradores", según la versión recogida por el diario argelino, que añadió que llevar "un traje 3 o 4 centímetros por encima de la rodilla se ha convertido en nuestros días en un crimen".

Según Alger-republicain, 'los testigos presentes animaron a los verdugos con frases como: 'Bravo muchachos, limpiad la ciudad de males sociales' o 'ella lo merece'".

La joven, aterrorizada, tuvo que refugiarse en un edificio cercano, delante del cual los muchachos montaron guardia.