Globalización, opulencia y miseria.
Javier Ortiz "José K, torturado", Atrapasueños editorial, 2010. (pág. 19).
---
Es lo que nos distingue a los humanos: somos capaces de cerrar los ojos. En particular ante el espejo. Lo necesitamos para sobrevivir. Unos cierran los ojos ante unas cosas; otros, ante otras. Si la gente viera, si la gente quisiera ver cómo se fabrica el café que se bebe cada mañana, si asumiera qué sórdida cadena de desgracia hay encerrada en ese paquetito de 250 gramos que compra en la tienda de la esquina; si hiciera lo necesario para saber lo mismo del azúcar, y de la gasolina que mueve su coche; si tomara conciencia de cómo se nutren las tripas de la radio made in Singapoore que enciende para no saber en realidad ni un pijo de lo que pasa de verdad… No podría aguantarlo: el diafragma le hundiría perpetuamente el corazón; le entraría una llantina infinita, inacabable; no se soportaría.
Todo vuestro ridículo Occidente vive en la opulencia gracias a que el resto de la Humanidad malvive en el hambre y la enfermedad. Pero no queréis verlo.
Vosotros tenéis los medios de decidir qué debe y qué no debe ver la mayoría.
1. ¿De qué trata este texto?
2. ¿Estás de acuerdo no lo que se dice en este texto? ¿Con qué parte estás de acuerdo o con qué parte no?
3. ¿Para qué crees que sirve saber lo que pasa?
4. ¿Qué clase de hechos nos ponen delante de los ojos los medios de comunicación? ¿Qué otros hechos nos ocultan? ¿Por qué?