La OMS y UNICEF denuncian que la cobertura de inmunización siguió disminuyendo en 2021 y 25 millones de niños y niñas no recibieron las vacunas que les pueden salvar la vida.
Se ha producido un nuevo descenso en la vacunación infantil contra diversas enfermedades. Las perturbaciones ocasionadas por la pandemia en los diferentes sistemas sanitarios han provocado un retroceso en los programas de inmunización nunca visto en 30 décadas, según ha advertido este viernes Naciones Unidas.
En concreto han sido dos de sus agencias la Organización Mundial de la Salud (OMS) y el Fondo de la ONU para la Infancia (UNICEF) las que han puesto de relieve a través de un comunicado conjunto que, por ejemplo, 25 millones de niños no han tenido acceso a la vacuna DTP3 contra la difteria, el tétanos y la tosferina, frente a los 23 millones de 2020.
"La salud de la infancia corre un grave peligro. Estamos asistiendo al mayor descenso sostenido de la vacunación de la infancia en una generación. Las consecuencias se medirán en vidas", ha asegurado la directora ejecutiva de UNICEF, Catherine Russell.
"Aunque el año pasado esperábamos sufrir una resaca de la pandemia como resultado de las interrupciones y los aislamientos provocados por la covid, lo que estamos presenciando ahora es un descenso continuado. La covid no es una excusa. Necesitamos que millones de niños y niñas reciban las vacunas que les faltan; de lo contrario, seremos testigos inevitables de más brotes, más niños y niñas enfermos, y más presión sobre unos sistemas de salud que ya están saturados".
Y es que la cobertura de la vacunación con DTP3 cayó el pasado año cinco puntos con respecto a 2019, hasta el 81%, "lo que muestra un creciente número de niños en riesgo de sufrir enfermedades evitables pero devastadoras", asegura la nota.
Aunque se esperaba que 2021 supusiera cierta recuperación tras el golpe sufrido por las campañas de inmunización en 2020, el primer año de pandemia, la cobertura de vacunaciones siguió bajando el pasado año (en el caso de la DTP3, hasta su mínimo nivel desde 2008).
La mayor parte de los afectados en este caso son niños de países de ingresos medios y bajos, con especial incidencia en India, Nigeria, Indonesia, Etiopía y Filipinas, destacaron OMS y UNICEF.